"TTIP. La abdicación de Europa" from TM-EX on Vimeo.
Mientras la noticia de la abdicación de Juan Carlos I hacía tambalearse los cimientos del país y de la monarquía, en otro punto de la capital tenía lugar otro traspaso de poderes. Esta vez una protesta ciudadana arreciaba ante las puertas de la Casa de América. Allí se celebraba una conferencia sobre el TTIP, el tratado trasatlántico que volverá a poner a Europa a los pies de Estados Unidos.
La campaña "No al Tratado Transatlántico de Comercio e Inversiones" había convocado a los movimientos sociales, las plataformas y diferentes colectivos para denunciar y visibilizar el rechazo a las negociaciones de un tratado que cercena los derechos y las libertades de todas las personas.
Según los convocantes el tratado comercial UE-EEUU, que se negocia en secreto desde junio 2013, tendrá graves impactos en la seguridad alimentaria, en el derecho a la privacidad y protección de datos, en las normas sociales y laborales y en leyes de protección ambiental.
El objetivo principal del tratado comercial UE-EEUU es privatizar los servicios públicos, desregular leyes y recortar derechos sociales y salarios en beneficio de las grandes multinacionales y, de paso, facilitar una competitividad fiscal a la baja que profundiza la evasión y elusión de impuestos así como los recortes en prestaciones sociales.
A la conferencia en la Casa de América asistieron representantes del Gobierno de España, la Cámara de Comercio de EEUU (AmCham), grandes multinacionales (como Iberdrola, IBM, Lilly, Repsol, Philip Morris), la patronal CEOE y el jefe negociador del TTIP por parte de la Comisión Europea, Ignacio García Bercero.
La campaña "No al Tratado Transatlántico de Comercio e Inversiones" había convocado a los movimientos sociales, las plataformas y diferentes colectivos para denunciar y visibilizar el rechazo a las negociaciones de un tratado que cercena los derechos y las libertades de todas las personas.
Según los convocantes el tratado comercial UE-EEUU, que se negocia en secreto desde junio 2013, tendrá graves impactos en la seguridad alimentaria, en el derecho a la privacidad y protección de datos, en las normas sociales y laborales y en leyes de protección ambiental.
El objetivo principal del tratado comercial UE-EEUU es privatizar los servicios públicos, desregular leyes y recortar derechos sociales y salarios en beneficio de las grandes multinacionales y, de paso, facilitar una competitividad fiscal a la baja que profundiza la evasión y elusión de impuestos así como los recortes en prestaciones sociales.
A la conferencia en la Casa de América asistieron representantes del Gobierno de España, la Cámara de Comercio de EEUU (AmCham), grandes multinacionales (como Iberdrola, IBM, Lilly, Repsol, Philip Morris), la patronal CEOE y el jefe negociador del TTIP por parte de la Comisión Europea, Ignacio García Bercero.
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